jueves, 3 de septiembre de 2009

IRLANDA COMO PROBLEMA O HISTORIA DE UNA USURPACIÓN MILENARIA





En época prehistórica, hacia el año 7000 a.C., un pueblo desconocido procedente de Iberia se asienta en el Valle del Río Boyne muy próximo a la actual Dublín.
En el siglo IV a.C., pueblos celtas gaélicos procedentes de Galicia desembarcan en la isla que los griegos denominaban Jerne, y también Iris.
Roma nunca llego a desembarcar en esta isla a la que llamaron Hibernia; nunca, pues, fue romanizada.
El año 430 d.C., San Patricio convierte a los irlandeses al cristianismo que pronto florece en comunidades, fundando monasterios que desarrollan una gran labor cultural, y sus misioneros evangelizan muchos territorios europeos durante los siguientes siglos.
Hacia el siglo VIII los vikingos procedentes de Noruega efectúan expediciones de saqueo de la costa nororiental de la isla y establecen refugios para sus naves.
Los daneses desembarcan en la isla combatiendo a los vikingos, expulsándolos de muchas de sus bases y fundando la ciudad de Dublín.
En el año 1014 los irlandeses gaélicos mandados por Brian Born vencen en la batalla de Clontarf y expulsan a los noruegos y daneses que explotaban la isla.
A lo largo del siglo XII el país se ve asolado por continuas luchas fratricidas que en vano trata de aplacar San Malaquias, obispo de Armagh (+ 1148).
El rey Dermot es expulsado de Leinster y se refugia en Inglaterra pidiendo ayuda para recuperar su trono a los sajones. El sajón Penbroke desembarca y ocupa Dublín en 1170 y coloca a Irlanda bajo el cetro de Enrique II[1] de Inglaterra (de la Casa Anjou Plantagenet). Enrique II se proclama "Lord of Ireland" implantando el feudalismo de los nobles anglonormandos, que se repartieron las tierras quitadas a los irlandeses celtas gaélicos que sufren la opresión más feroz.
En 1174, O'Connor se subleva contra los ingleses y consigue llegar a un acuerdo con Enrique II efectuándose la partición de la isla, una parte bajo la autoridad de O'Connor y la otra sometida al rey ingles por medio de un gobernador y un Parlamento. Al morir O'Connor se reanudan las luchas intestinas en la parte independiente de la isla.


[1] Enrique II sometió también a Escocia. Fue el asesino de Tomas Becket.

En 1289 Eduardo I de Inglaterra expulsa de sus dominios de Inglaterra e Irlanda a los judíos, odiados por el pueblo a causa de sus usuras, estos marchan a establecerse en Amberes.
Durante la guerra de los cien anos (1337-1453) Irlanda consigue recuperar su independencia, por poco tiempo pues el rey ingles Enrique VII (Tudor) (1485-1509), al finalizar la guerra de las dos rosas, desembarca en Irlanda y ocupa totalmente la isla.
Hasta comienzos del siglo XVI, el problema Irlandés es la lucha por su independencia de los celtas gaélicos contra la dominación inglesa de tipo feudal medieval y opresivo por parte de la nobleza anglosajona, de una crueldad característica de las razas nórdicas.
Es en el reinado de Enrique VIII (Tudor), proclamado rey de Irlanda, cuando se complica el problema con la lucha religiosa, y es este monarca ingles el gran responsable de convertir en una guerra de religión la lucha de los irlandeses por su independencia.
Enrique VIII (1509-1547) decide separar a Inglaterra de la obediencia al romano Pontífice por medio del "Acta de Supremacía" de 1533 que crea la iglesia anglicana cuya jefatura ostentará el rey de Inglaterra, dando lugar al último cisma sufrido por la Iglesia Católica. Muchos ingleses no aceptan la decisión real y sufren martirio. Se calcula son ejecutados casi cien mil católicos ingleses por no acceder al capricho del rey cuyo motivo verdadero era, como se sabe, su deseo de repudiar a la reina Catalina de Aragón (hija de los Reyes Cat6licos) para matrimoniar con Ana Bolena, dama de honor de la reina. Uno de los mártires ingleses fue Tomas Moro que pasó de ser Canciller a la Torre de Londres donde seria decapitado.
Irlanda no acepta la decisión del rey y defiende su catolicismo con valor ejemplar, se produce una horrorosa persecución contra los irlandeses católicos que da lugar a miles de mártires.
A la muerte de Enrique VIII es proclamada la reina Maria Tudor (1553-1558), hija de Catalina, que casa con Felipe II de España y suprime la persecución a católicos.
Isabel I (1558-1603). Al subir al trono restaura la persecución contra católicos, con particular crueldad en Irlanda que, como castigo por su fidelidad a Roma, es convertida en colonia de Inglaterra. En 1569, en la conferencia de Münster, los irlandeses deciden defender a su patria y religión contra los ingleses que deciden construir un enclave protestante en la zona más gaélica de Irlanda, el Ulster; para ello trasladan allí presbiterianos escoceses y anglicanos.
Durante todo el siglo XVII se reparten miles de hectáreas entre colonos ingleses y escoceses de religión presbiteriana quitando sus tierras a los irlandeses católicos, reduciéndolos a la pobreza. Se prohíbe a los sajones anglos todo contacto, por supuesto los matrimonios, con los gaélicos irlandeses para evitar la mezcla de razas y asimilación por los irlandeses más numerosos aunque mas pobres.
En 1641, reinando Carlos I (Estuardo), Irlanda se subleva contra los ingleses obteniendo pequeños éxitos. Pero cuando Oliverio Cromwell ejecuta al rey Carlos I y proclama la Republica desembarca en Irlanda y, en 1653, vence a los irlandeses produciendo uno de los verdaderos y más horrorosos holocaustos de la Historia, eliminando a las 5/6 partes de la población irlandesa católica, asesinando a muchos hombres y vendiendo como esclavos a mujeres y niños en las colonias de América. Se derriban la mayor parte de las casas de los irlandeses, los 2/3 de la tierra se regalan a protestantes ingleses y escoceses, se impide a los católicos ocupar ningún tipo de cargos en la policía y administración publica. Los católicos no pueden tener un caballo de más de 10 libras de precio. En caso de que un inglés denuncie al propietario de un caballo de ese precio, se le da el caballo al inglés pagando las 10 libras. El obispo Mac Mahon es ahorcado. Los irlandeses no pueden poseer fincas mayores de cierto tamaño.
En 1656, el tirano Cromwell decide asentar en Irlanda a un importante contingente de judíos portugueses para crear un núcleo de anticatólicos adinerados e influyentes en Europa con presbiterianos y anglicanos.
La crueldad de Cromwell fue tal que, tras su muerte, los propios ingleses desentierran el cadáver y lo ahorcan.
En 1660, el general Monk restaura la monarquía en la persona de Carlos II Estuardo (1660-85) que suaviza mucho la persecución anticatólica en Irlanda.
Jacobo II (1685-88) Estuardo era católico, pone fin a la persecución contra los católicos y pretende restaurar el catolicismo, pero entonces el Parlamento le destrona llamando a Maria (hija de Jacobo II), casada con Guillermo Orange, calvinista feroz, que desembarca en Inglaterra venciendo a su suegro Jacobo II y destronándole. Es proclamada reina Maria II junto a su marido, el feroz calvinista Guillermo príncipe de Orange, que se autonombra Guillermo III de Orange. A la muerte de Maria II, Guillermo permanecerá como rey de Inglaterra (1689-1702).
Guillermo III de Orange, desata una de las más feroces y sangrientas persecuciones contra los irlandeses.
En 1689, con apoyo de Luís XIV de Francia, Jacobo Estuardo (nieto de Maria Estuardo, ejecutada por Isabel I) desembarca en Irlanda en defensa de los católicos. Pero Guillermo de Orange acude con poderoso ejército de calvinistas, anglicanos y presbiterianos y vence a los gaélicos en la batalla de Boyne. La persecución contra irlandeses católicos adquiere los caracteres más sádicos, se ejecuta a miles de católicos, muchos sacerdotes son martirizados. Se prohíben los actos de culto católicos en las iglesias bajo pena de muerte, se encarcelará a quien hable gaélico. Los católicos, por el hecho de serlo, son obligados a pagar el diezmo al gobierno protestante.
Es entonces cuando se crea la Orden de Orange, donde se encuadra desde niños a los protestantes, se le da una estructura paramilitar con su correspondiente uniforme, se les dota de armamento procedente del ejército inglés y actúan como colaboradores del ejército inglés de ocupación. Ocupan cargos directivos los pastores protestantes que se distinguen por su violencia e intransigencia. A partir de entonces celebran sus macabros desfiles procesionales por las calles de los barrios católicos, para provocar a los católicos y demostrar su dominio absoluto, protegidos por la policía y el ejército inglés de ocupación.
En 1783, reinando Jorge III (Hannover), se organiza la "Liga de Irlandeses Unidos" que se subleva contra el dominio ingles en 1796 dirigidos por Wolf Tone. El ejército inglés, ayudado por los orangistas, vence y capturan a Wolf Tone que es degollado en su celda.
En 1800, reinando Jorge IV, se publica el "Acta de Unión" que establece que Irlanda forma parte del Reino Unido y envía al Parlamento 100 diputados, naturalmente protestantes.
En 1828 O'Connell, elegido diputado, se negó a jurar fidelidad a la corona inglesa.
El pueblo irlandés seguía sometido a condiciones humillantes, como la prohibición de ser propietario de tierras o ganado, no poder ocupar cargos públicos y otras. Su situación dentro del imperio era la de colonia de la corona.
Surge entonces una organización importante "los fenianos" (Irish Republican Brotherhood, IRB) fundada en 1858 en Dublín y Nueva York a la vez. Era una verdadera sociedad secreta al estilo de los carbonarios italianos.
En 1865, al concluir la guerra de secesión americana, llegó a Irlanda un importante número de oficiales americanos de ascendencia irlandesa dispuestos a organizar un levantamiento contra la opresión inglesa, pero fracaso.
Se constituyo el IPP (Partido del Parlamento Irlandés) que consiguió modificar el sistema de propiedad de la tierra de tal modo que los irlandeses católicos pudieran ser propietarios sin restricciones.
A finales del siglo XIX surge la "Liga Gaélica", en 1893, con el objetivo de defender la lengua gaélica. Y el "Sinn Fein" (nosotros solos) en 1905 para luchar contra los protestantes orangistas que tenían la "Ulster Volunteer Force", verdadero ejército de la Orden de Orange perfectamente dotado de armamento del ejército inglés. El "Sinn Fein", fundado por el periodista Griffith, denuncia el Acta de Unión de 1800.
En 1912, en tiempos de Jorge V, Irlanda consigue la autonomía "Home Rule".
En 1916, aprovechando que Inglaterra participa en la guerra europea, se efectúa un alzamiento irlandés contra el dominio inglés dirigido por hombres del IRB, de los voluntarios irlandeses creados en 1914 para defensa de la isla, y del Ejército ciudadano irlandés. El ejército inglés aplasta la sublevación en pocos días y fusila a sus dirigentes.
Uno de los condenados a muerte fue Edmon De Valera, pero le fue conmutada por cadena perpetua.
El "Sinn Fein" gana las elecciones de 1918 al parlamento y decide constituirse en "Dail Eirean" (Parlamento irlandés), proclaman la Republica eligiendo presidente a De Valera[2] que estaba en la cárcel y al cual los ingleses no permiten salir de la prisión. De Valera consigue escapar de la cárcel y marcha a Nueva York para conseguir dinero.


[2] Edmon De Valera de padre español y madre irlandesa, nacido en Nueva,York.


En 1919 Inglaterra suprime el Dail. Es entonces cuando comienza la guerra de guerrillas organizada por el IRA (Irish Republican Army) que desencadena un feroz terrorismo. El IRA nace con los restos del IRB aniquilado por los ingleses que fusilaron a sus siete líderes.
El ejército inglés, ayudado por la Orden de Orange, desencadena una represión feroz que dura hasta hoy día.
En 1921 se inician conversaciones de paz entre irlandeses e ingleses, representados por De Valera y Lloyd George. Las comisiones llegaron a un acuerdo firmado por Griffith en el que se reconocía la partición de la isla: el "Ulster" perteneciente a la Gran Bretaña y el resto de la isla reconocido como "Estado libre de Irlanda" con estatuto de Dominio análogo a Australia y Canadá.
El tratado, que segregaba de Irlanda la provincia del Ulster, la más gaélica, produjo la división en el Sinn Fein. De Valera y los suyos se opusieron a la partición pero, no obstante, el tratado fue aprobado por el parlamento irlandés en 1922. Estas diferencias dieron lugar a una guerra civil que duró hasta 1923 con la derrota de De Valera y su Fianna Fail.
En 1932, De Valera gana las elecciones y forma gobierno, abolió el juramento de fidelidad a la corona, y proclamo una nueva Constitución en 1937 por la que se declaraba a Irlanda: Estado Soberano e Independiente dentro de la Commonwealth, realmente convertida en República. En 1939 se declara ilegal al IRA. Durante la Segunda Guerra Mundial, Irlanda se mantuvo neutral a pesar de las presiones ejercidas por Roosewelt.
En 1945 los sindicatos irlandeses se separan de los ingleses.
En las elecciones de 1948, De Valera cae derrotado y entra a presidir el gobierno Costello, que declara a Irlanda República en 1949.
En 1956, el IRA del Ulster desencadena una serie de ataques a instalaciones del ejército inglés. El ejército inglés y la Orden de Orange responden con una represión durísima que se extiende hasta hoy.
En 1969, ante el anuncio de luchas entre orangistas e irlandeses, el ejército inglés acude para separar a los contendientes, es bien recibido por los católicos que esperan frene a los orangistas que han asaltado ya varias calles de los barrios católicos. Pero pronto se dan cuenta los católicos de que el ejército ingles a quien ayuda es a los protestantes que se protegen enarbolando la enseña de la Unión Jack, los soldados son sajones y protestantes, y naturalmente se ponen del lado de los provocadores de la Orden de Orange que cometen toda clase de tropelías en los barrios católicos, con numerosos muertos, algunos por balas del ejército inglés.
¿Que piden los irlandeses? Muy sencillo, la formación de un Parlamento Nacional en el que se encuentren representadas las cuatro provincias históricas de Irlanda: Ulster, Connaught, Leinster y Munster.


Semejanza con España

Irlanda y España tienen parte de su territorio ocupado militarmente por Inglaterra, terrenos ocupados de modo ilegítimo. Gibraltar y Ulster sufren una situación colonial, la población original fue eliminada por los ingleses y sustituida por extranjeros desarraigados, enemigos de los naturales por toda clase de razones, entre otras la religiosa. En Gibraltar los ingleses han asentado a judíos, malteses, contrabandistas del Mediterráneo y toda suerte de delincuentes. Los españoles en Gibraltar no pueden ser propietarios de una casa, si la reciben por herencia deben venderla a un gibraltareño en un plazo de dos meses, en otro caso es expropiada por el gobierno de Gibraltar. Protegidas por la guarnición inglesa, funcionan organizaciones de contrabandistas, blanqueadores de dinero negro, tráfico de drogas, de armas y todo tipo de actividades delictivas.
Irlanda y España han sido siempre naciones y poblaciones amigas. Muchos irlandeses, escapados de la tiranía inglesa en tiempos de Enrique VIII de Cromwell o de Guillermo de Orange, se refugiaron en España y aquí siguen sus descendientes. El que esto escribe tiene entre sus antepasados un Kindelant, que pudo huir de la horca en tiempos de Orange.

Firmado: Paco Hispano y Kindelant.